SNIP, perverso mecanismo centralizador

José Amy

La Rendición de Cuentas sancionada recientemente en la CC.RR, trajo varias sorpresas que intentaremos ir desarrollando en otras entregas, singular atención nos generó la aparición del SNIP( Sistema Nacional de Inversión Pública) dentro de la órbita de la OPP, el que significa a todas luces, el paso mas osado en materia  de centralización, por parte de la Administración Mujica. La descentralización siempre nos ha sido difícil de cristalizarla para la gente del interior, en especial en acciones concretas.  La Constitución de 1918 emergente de los denominados “Apuntes de Batlle”, apostaba al primer ensayo  colegialista en el Poder Ejecutivo, allí por primera vez, en nuestro derecho constitucional, es donde se utilizó la palabra  “autónomo”  para  referirse  a  los Consejos  de Administración  de  los  gobiernos  locales. El “progresismo escrito” del que habla Carlos Martínez Moreno (en “Uruguay Hoy”, “Crepúsculo en Arcadia”, Pág. 408), por el cual se creía que cambiando la Constitución se nos solucionaban los problemas, nos llevó a contar con una nueva Constitución en 1934. Allí se  mantiene la expresión autónomos, para  referirse  a  los  Directorios  de  los  Entes  del  dominio industrial y comercial del Estado, a los Consejos Directivos de  enseñanza pública y  aparece la figura del Intendente como la cabeza del ejecutivo Dtpal, las Juntas Dptales como organismos de control, con funciones legislativas, y el primer paso en lo que hoy se define como el tercer nivel de gobierno, las Juntas Locales. El Dr. Daniel Hugo Martins especialista en temas Municipales, autor de varios libros, confirma en uno de ellos; “El  Gobierno  y  la  Administración  de  los Departamentos”, tomo II, 2da. Ed., 2006, p. 57, la existencia a nivel de los Gob. Dptales la existencia de autonomía; política, legislativa, presupuestaria, tributaria, financiera, administrativa.

Si bien la existencia de éstas,  no implica utilización práctica de las mismas  desde 1934  hasta ahora la descentralización había avanzado sin retrocesos sustantivos. Es más he catalogado como un gran progreso, de descentralización interna Dptal (tercer nivel de gobierno) la Ley 18567 impulsada por la administración del Dr. Vázquez, creando   los Municipios, avance perfectible sobre el que deberemos de avanzar,  dotándolos presupuestamente, es una fuerte arremetida contra la discrecionalidad, de los Intendentes, a la hora de convocar a ciudadanos, a trabajar, por sus comunidades a través de las Juntas locales. Ha sucedido todo lo contrario con esta administración del PTE Mujica, marcando un claro retroceso en descentralizar, su plan es la centralización, en recursos, en proyectos y en ejecuciones, su  objetivo es claro, manejar y condicionar a los Intendentes. Pero debemos ser bien claros, esto lo advertimos en las instancias de discusión del Presupuesto 2010-2015, allí dijimos que los Intendentes, embelezados por el Presidente Mujica, cedían autonomía, y favorecían el centralismo, tal fue la actitud que acordaron con Mujica sin consultar sus órganos partidarios, con la peregrina idea que lo iban a dominar al PTE, pues el tiro les salió por la culata. La creación del SUCEVI fue el primer paso, desconociendo el art. 297, de la Constitución, el que si bien solucionaba el problema de las patentes, generado por los propios Intendentes, era una clara sesión de autonomía.  El cobro de la Tasa de alumbrados público, a nivel central eran algunas de las primeras señales, sumado  a una permanente aquiescencia de los Intendentes. En ese campo fértil abonado por los Intendentes, el gobierno central dio otro paso centralizador, en la Rendición de Cuentas,  en su art. 18 crea el SNIP ( Sistema Nacional de Inversión Pública) el que tendrá injerencia en toda Institución que proyecte y ejecute invasión publica, entre las que se encuentran el su inc C) los Gobiernos Departamentales. Hoy se reconoce por parte de algunos Intendentes que Mujica se los llevó puestos y que este perverso mecanismo centralizador, operará en contra del interior del país y de muchos de sus propios planes de obras  que quieran implementar.