Réplica al Canciller Almagro
Dr. Edison González Lapeyre
El Sr. Canciller Almagro, mintiendo en forma descarada y con una arrogancia sorprendente en un funcionario de su jerarquía, ha afirmado a la prensa de que yo fui removido del equipo legal del Uruguay en el caso Botnia y que estoy equivocado al afirmar que nuestro país puede actuar unilateralmente y autorizar el aumento de la producción de pasta de celulosa por la empresa UPM.
Respecto al primer punto, su mentira tiene patas cortas. Yo no fui removido. Renuncié cuando se decidió promover la medida cautelar contra el bloqueo de los puentes. En esa oportunidad, en presencia del Canciller Gargano y de varios funcionarios entre los que se encontraba el Secretario General de la época Embajador Cancela que puede ser consultado, manifesté mi desacuerdo con esa medida, agregando que se iba a perder y que ello iba a envalentonar a los piqueteros de Gualeguaychú, por lo que di un paso al costado. Como debería estar enterado el Señor Canciller, la medida cautelar fue rechazada por la Corte Internacional de Justicia y por ese rechazo, los piqueteros se sintieron avalados en su ilegítimo bloqueo.
Con respecto al segundo punto, el Señor Ministro muestra una ligereza inaceptable, ya que me atribuye algo que no es cierto. La realidad es que nunca sostuve que nuestro país, sin cumplir con el régimen de consulta de los arts. 7 a 12 del Estatuto del Río Uruguay, podía actuar unilateralmente. Por el contrario, si el Señor Canciller analiza mis declaraciones al diario El País, del 2 del corriente, podrá verificar que he sostenido lo opuesto citando precisamente a la Ordenanza de la Corte Internacional de Justicia en cuanto a cumplir con el procedimiento de consulta y esperar a que se cumplan los plazos allí establecidos.
El Señor Canciller, muy sobrador y astuto, me recomienda leer los trabajos de mi autoría sobre este tema, posiblemente haciendo referencia a mi libro “Límites de la República Oriental del Uruguay”, publicado hace 21 años donde sostuve que el Derecho internacional impediría el actuar unilateralmente antes de haber agotado todas vías posibles de negociación y de solución de controversias” (p.296) . Sigo pensando lo mismo, obviamente, considerando que “las vías posibles de negociación y de solución de controversias” son las establecidas en los arts. 7 a 12 y que deben desarrollarse en los plazos allí indicados.
En síntesis:
A) El Señor Canciller Almagro, miente cuando afirma que fui removido del equipo legal del Uruguay en el caso Botnia. Renuncié por las razones indicadas anteriormente y él debe saberlo.
B) Se equivoca feo, por guiarse por las palabras de un periodista, cuando me atribuye haber sostenido que, sin cumplir con el procedimiento de consulta, se puede actuar unilateralmente. Realmente, es injustificable que un Señor Canciller le asigne a una persona manifestaciones que nunca realizó, porque jamás he sostenido tal postura, sino que por, en reiteradas oportunidades, he afirmado lo contrario conforme a lo dispuesto por la Ordenanza de la Corte Internacional de Justicia del 20 de abril de 2010.
C) Se equivoca asimismo, cuando interpreta sesgadamente lo que dije en un libro publicado hace más de dos décadas.
Pero las incoherencias y errores del Ministerio a cargo del Dr. Almagro, son múltiples y tienen mucha mayor trascendencia que las referidas a mi modesta persona, porque afectan a la soberanía nacional.
Sería muy largo referirme a lo actuado con respecto a los canales de Martín García, a los muelles en las proximidades de Nueva Palmira, al dragado del Río Uruguay, a la delimitación de nuestra plataforma continental, al puerto de aguas profundas, a su participación en la suspensión del Paraguay del Mercosur etc., por lo que, como muestra simplemente, voy a referirme sólo al canal lateral que va a construir la República Argentina en el Río de la Plata. El proyecto correspondiente fue presentado a la delegación uruguaya ante la CARP en el 2005, con todos los datos técnicos necesarios. La respuesta de nuestro país prestando el consentimiento, se formuló en el acta No. 416 de 17 de noviembre de 2006, “en el entendido” de que Argentina iba a profundizar los canales de Martín García.
Y ¿cuándo se enteran, en ese Ministerio, de la existencia de ese proyecto consentido? Recién el 19 de agosto pasado por un artículo de Emilio Cazalá, publicado en su página de Marítimas de El País. Nadie estaba enterado, no existen informes, anteriores a esa publicación, del ex presidente de la delegación uruguaya ante la CARP Embajador Bustillo ni del actual, Embajador Koncke, al respecto, porque si los hubiera habido, el tema se habría discutido y, eventualmente, se habría impugnado el consentimiento otorgado o se hubiese exigido la contrapartida. Es tal el desorden que existe en la Cancillería que transcurrieron 7 años y que gracias a la investigación de un periodista, su titular, se entera de ese proyecto y de ese emprendimiento que tiene aspectos muy negativos para los intereses del país y que fue consentido por nuestros representantes en la CARP.
Realmente, como antiguo funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores, al que ingresé en 1968, me da pena que esa importante Secretaría de Estado sea ejercida por este señor, cuando tuve el privilegio de servir con ministros de la talla de Venancio Flores, José Antonio Mora Otero, Luis Barrios Tassano, Enrique Iglesias, Héctor Gros Espiell y Sergio Abreu, entre otros.