Esperando

pedroEn el mes de Diciembre presentamos una nota, junto con cuatro Senadores, solicitando al Presidente del Senado que levante el receso Parlamentario y fije una sesión (o las que sean necesarias) para tratar cuatro proyectos de ley que se encuentran desde hace más de un año en el Parlamento.

Como la solicitud lleva la firma de cinco senadores, el Presidente del Senado, debe fijar día y hora para la sesión, en la que primero se analizará levantar el receso y luego, en caso de que así suceda, se tratarán los cuatro proyectos de ley.

Estamos esperando la convocatoria para dicha sesión, la que no ha sido fijada aún pero que de acuerdo con el Reglamento del Senado, debe, si o si, llevarse a cabo.

El primero de esos proyectos refiere al gobierno de la Educación. Por él proponemos que se recupere el gobierno de la Educación para los representantes del Pueblo. Entendemos que quienes representan intereses corporativos (y como tales particulares y no generales) deben tener voz pero no voto.

Como respuesta se acaba de cesar al Presidente de uno de los organismos. No se han dado cuenta que el tema es no principalmente de capacidades sino de organización y gobierno.

El segundo proyecto propone un mínimo de 200 días de clase por año. La semana pasada el Observatorio de Educación de Fundapro hizo públicos los números de cantidad de clases efectivas en el año 2013. Estamos, en casi todos los niveles, lejos, muy lejos, de esa meta.

Sé que con cantidad  de tiempo educativo solamente no alcanza, que es necesaria calidad también. Pero una cosa no excluye la otra porque sin un mínimo de tiempo no posible tener calidad de educación.

El tercer proyecto persigue crear 100 liceos públicos de gestión comunitaria, similares al Jubilar, el Impulso y, el próximo a iniciar su actividad, Providencia.

Los resultados de repetición y de las pruebas Pisa dejaron bien en claro la enorme diferencia entre los centros educativos según el nivel socio cultural. Estos liceos son una respuesta clara y contundente a esa inequidad, inspirados en la misma filosofía que los Centros Caif y los Programas de Acción PAC.

El cuarto proyecto crea la Universidad de la Educación,  con la finalidad de dotar de titulación universitaria y mejor capacitación a los docentes. El proyecto es ambicioso y pretende también aprovechar la posibilidad que nos da la Constitución de la República de contratar como funcionarios públicos docentes a extranjeros. Así como enviar a docentes uruguayos a formarse en el exterior.

Este proyecto tiene las mayorías hoy para ser aprobado. Pero discusiones internas del Frente Amplio no lo permite. Toda la oposición anunció que votaría a favor de nuestro proyecto si no se establece el co gobierno. En la prensa se informó que varios legisladores del Frente Amplio están de acuerdo en votarlo también sin él, pero que no lo hacen por discusiones internas en el oficialismo.

Es el momento de tener coraje, de ser valientes, de mirar al futuro y construir una propuesta que vaya más allá de las fronteras partidarias.

Es el momento de levantar el receso parlamentario y trabajar para tener 100 liceos públicos de gestión comunitaria, 200 días de clase, un mejor gobierno de la educación y una nueva Universidad.

Dentro de un año, el Uruguay será un mejor país si aprobamos esos proyectos de una vez por todas este verano.

Hacemos votos para que se levante el receso parlamentario y se fije prontamente la sesión para tratar los proyectos de ley.

El Presidente del Senado y Vice Presidente de la República tiene la palabra.

La educación de los nuestros niños y jóvenes no admite más demoras.